La capacitación va dirigida al perfeccionamiento técnico y a las habilidades blandas del trabajador ayudando a los trabajadores a aumentar sus capacidades y habilidades en las funciones asignadas, desarrollando un crecimiento en el saber ejecutar de mejor manera sus funciones. Esto hará que el trabajador se vuelva más competente y hábil al momento de ejecutar sus labores, a su vez la empresa se beneficia al desarrollar y utilizar las habilidades del trabajador.
Con un programa de capacitación la visión interna cambia notablemente, aumentando el desarrollo y confianza del trabajador hacia la empresa quien a su vez logra metas personales, eleva el nivel en su puesto de trabajo y ayuda a la integración de grupos.
La visión externa también se ve beneficiada volviéndose fuerte, productiva, rentable y por consecuencia mucho más estable de manera costo-efectividad entregando excelentes servicios a sus clientes.
Aunque algunos empresarios aun consideran que implementar un programa de capacitación para sus empleados resulta un gasto innecesario, debemos tener claro que las empresas son un grupo de personas trabajando con un fin en común y el éxito o fracaso y de ella depende del talento del material humano.
Cesar Huaiquifil M.
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